Ejemplos de análisis coste-beneficio en la vida cotidiana
El coste de la vida es la cantidad de dinero necesaria para cubrir los gastos básicos como la vivienda, la comida, los impuestos y la asistencia sanitaria en un lugar y un periodo de tiempo determinados. El coste de la vida se utiliza a menudo para comparar lo caro que es vivir en una ciudad frente a otra. El coste de la vida está ligado a los salarios. Si los gastos son mayores en una ciudad, como Nueva York, por ejemplo, los niveles salariales deben ser más altos para que la gente pueda permitirse vivir en esa ciudad.
El coste de la vida puede ser un factor importante en la acumulación de riqueza personal porque un salario puede proporcionar un nivel de vida más alto en una ciudad donde los gastos diarios, como el alquiler, la comida y el entretenimiento, son menores. Por el contrario, un salario alto puede parecer insuficiente en una ciudad cara como Nueva York. En una encuesta de 2018, Mercer, una empresa global de recursos humanos, encuentra que las ciudades con el mayor coste de la vida incluyen Hong Kong; Luanda, la capital de Angola; Tokio; Zúrich y Singapur, en ese orden. La ciudad de Nueva York fue clasificada como la más costosa de Estados Unidos, seguida de San Francisco y Los Ángeles, Chicago, Washington y Boston.
Ejemplos de contabilidad en la vida cotidiana
Alimentación, sanidad, transporte, ocio… el coste de la vida en Francia puede ser bastante elevado, sobre todo en París y en las grandes ciudades. Es mejor que prepare su presupuesto para evitar sorpresas desagradables cuando se mude aquí.
Puede ser muy útil abrir una cuenta bancaria en Francia, sobre todo para pagar las facturas (electricidad, teléfono, alquiler) y las suscripciones (transporte, Internet). También podrá cobrar los sueldos que reciba y es más fácil que le reembolsen los gastos sanitarios. Una tarjeta de pago francesa también le permite pagar la mayoría de las cosas para no tener que llevar grandes cantidades de dinero en efectivo.
Tener una cuenta bancaria francesa es un derecho reconocido por las autoridades francesas. Un estudiante extranjero puede abrir una cuenta bancaria en cualquier banco de Francia. Los diferentes bancos tienen sucursales en la mayoría de las ciudades; basta con abrir la puerta y pedir una cita con un consejero.
Para abrir una cuenta bancaria se necesitan tres documentos: un documento de identidad, una prueba de residencia y un certificado de matriculación o una tarjeta de estudiante. Si todavía no tienes alojamiento, puedes utilizar la dirección del servicio de relaciones internacionales de tu institución.
Cómo puedes aplicar la contabilidad en tu vida diaria como estudiante
“El coste de oportunidad es el valor de la siguiente mejor alternativa cuando se toma una decisión; es a lo que se renuncia”, explica Andrea Cáceres-Santamaría, especialista senior en educación económica de la Fed de St: El dinero y las oportunidades perdidas.
No podemos tener todo lo que queremos en la vida. Aquí es donde entra en juego la escasez. Nuestros deseos ilimitados se enfrentan a una oferta limitada de bienes, servicios, tiempo, dinero y oportunidades. Este concepto es el que impulsa las elecciones y, por extensión, los costes y las compensaciones, dice Cáceres-Santamaría.
Por eso Cáceres-Santamaría nos desafía a considerar no sólo las alternativas explícitas -las opciones y los costes presentes en el momento de la toma de decisiones- sino también las alternativas implícitas, que son los costes de oportunidad “invisibles”.
Puede que no consideremos que la pérdida de tiempo de estudio o los 7 dólares gastados en un batido sean decisiones costosas, pero ¿qué pasa con las decisiones más importantes, como la de estirarse y comprar una casa más cara en lugar de una vivienda inicial, o la de gastar 1.500 dólares más en un paquete de equipamiento mejorado para su próximo coche?
¿Cómo afecta a sus actividades diarias?
“El coste de oportunidad es el valor de la siguiente mejor alternativa cuando se toma una decisión; es a lo que se renuncia”, explica Andrea Cáceres-Santamaría, especialista principal en educación económica de la Fed de St: El dinero y las oportunidades perdidas.
No podemos tener todo lo que queremos en la vida. Aquí es donde entra en juego la escasez. Nuestros deseos ilimitados se enfrentan a una oferta limitada de bienes, servicios, tiempo, dinero y oportunidades. Este concepto es el que impulsa las elecciones y, por extensión, los costes y las compensaciones, dice Cáceres-Santamaría.
Por eso Cáceres-Santamaría nos desafía a considerar no sólo las alternativas explícitas -las opciones y los costes presentes en el momento de la toma de decisiones- sino también las alternativas implícitas, que son los costes de oportunidad “invisibles”.
Puede que no consideremos que la pérdida de tiempo de estudio o los 7 dólares gastados en un batido sean decisiones costosas, pero ¿qué pasa con las decisiones más importantes, como la de estirarse y comprar una casa más cara en lugar de una vivienda inicial, o la de gastar 1.500 dólares más en un paquete de equipamiento mejorado para su próximo coche?