El existencialismo explicado
El existencialismo es un término que engloba a aquellos filósofos que consideran la naturaleza de la condición humana como un problema filosófico clave y que comparten la opinión de que este problema se aborda mejor a través de la ontología. Esta definición tan amplia se aclarará analizando siete temas clave que abordan los pensadores existencialistas. Los filósofos considerados existencialistas proceden en su mayoría del continente europeo y datan de los siglos XIX y XX. Fuera de la filosofía, el movimiento existencialista es probablemente el movimiento filosófico más conocido, y al menos dos de sus miembros se encuentran entre las personalidades filosóficas más famosas y los autores filosóficos más leídos. Sin duda ha tenido una influencia considerable fuera de la filosofía, por ejemplo en la teoría psicológica y en las artes. Sin embargo, dentro de la filosofía, se puede decir que este movimiento poco definido, considerado en su conjunto, no ha tenido un gran impacto, aunque los individuos o las ideas que se cuentan en él siguen siendo importantes. Además, la mayoría de los filósofos agrupados convencionalmente bajo este epígrafe nunca utilizaron el término “existencialista” o lo rechazaron activamente. Incluso el propio Sartre dijo una vez: “¿Existencialismo? No sé qué es eso”. Así pues, se puede argumentar que el término -en la medida en que nos lleva a ignorar lo que es distintivo de las posiciones filosóficas y a mezclar ideas significativamente diferentes- hace más daño que bien.
Crisis existencial
En su diario, Kierkegaard escribió: “Lo que realmente necesito es tener claro lo que debo hacer, no lo que debo saber… la cosa es encontrar una verdad que sea verdad para mí, encontrar la idea por la que estoy dispuesto a vivir y morir”. Encontrar esta verdad, esta pasión, era lo que Kierkegaard pensaba que podía unir una existencia, superar la melancolía y ayudarte a ser más pleno. Kierkegaard tenía algunas ideas sobre cómo aprovechar la angustia de lo que hemos llegado a considerar una crisis existencial. La lectura de Kierkegaard no resolverá necesariamente todos los problemas, pero puede ayudarte a comprender algunas de las fuentes de tu malestar y a ver nuevas posibilidades para tu vida.
A veces se llama a Kierkegaard el primer filósofo existencial por su énfasis en el individuo y la experiencia subjetiva. Los filósofos existenciales hacen hincapié en la libertad de elección y en la responsabilidad por las consecuencias de tus elecciones, y ciertamente uno de los filósofos existencialistas por excelencia, Jean-Paul Sartre (1905-80), encontró esta línea de pensamiento en los escritos de Kierkegaard. Para los existencialistas, uno debe decidir qué tipo de persona quiere ser y cómo vivir su vida con sentido. Pero estas decisiones alimentan la desesperación debido a la presión que surge cuando te das cuenta de que eres libre y responsable y no tienes a nadie más a quien culpar, ni excusas para tu comportamiento. La ansiedad o la desesperación, escribió Kierkegaard, es el “vértigo de la libertad”. La desesperación es una especie de vértigo que sufrimos cuando estamos abrumados por las posibilidades y las opciones. Kierkegaard la describió como una sensación similar a la de estar al borde de un abismo. Puedes tener miedo de caer, pero te sientes ansioso cuando te das cuenta de que saltar es una posibilidad.
Existencialismo
El existencialismo es una teoría filosófica según la cual las personas son agentes libres que tienen control sobre sus elecciones y acciones. Los existencialistas creen que la sociedad no debe restringir la vida o las acciones de un individuo y que estas restricciones inhiben el libre albedrío y el desarrollo del potencial de esa persona. Para entender el existencialismo es importante ver ejemplos de acciones, preguntas y situaciones existenciales. También es divertido mirar el mundo del cine para ver qué películas y directores fueron famosos por su uso del existencialismo.
Pavor existencial
(/ˌɛɡzɪˈstɛnʃəlɪzəm/[1] /ˌɛksəˈstɛntʃəˌlɪzəm/[2]) es una forma de investigación filosófica que explora el problema de la existencia humana y se centra en la experiencia subjetiva del pensar sentir y actuar. [3] [4] Por ejemplo, desde el punto de vista de un existencialista, el punto de partida del individuo se ha denominado “la angustia existencial”, una sensación de pavor, desorientación, confusión o ansiedad ante un mundo aparentemente sin sentido o absurdo[5] Los pensadores existencialistas exploran con frecuencia cuestiones relacionadas con el significado, el propósito y el valor de la existencia humana.
Muchos existencialistas consideraban que las filosofías sistemáticas o académicas tradicionales, en estilo y contenido, eran demasiado abstractas y alejadas de la experiencia humana concreta[8][9] Una virtud primordial en el pensamiento existencialista es la autenticidad[10] El existencialismo influiría en muchas disciplinas fuera de la filosofía, como la teología, el teatro, el arte, la literatura y la psicología[11].
El término existencialismo (en francés: L’existentialisme) fue acuñado por el filósofo católico francés Gabriel Marcel a mediados de los años 40.[12][13][14] Cuando Marcel aplicó por primera vez el término a Jean-Paul Sartre, en un coloquio en 1945, éste lo rechazó. [Posteriormente, Sartre cambió de opinión y, el 29 de octubre de 1945, adoptó públicamente la etiqueta de existencialista en una conferencia en el Club Maintenant de París, publicada como L’existentialisme est un humanisme (El existencialismo es un humanismo), un breve libro que contribuyó a popularizar el pensamiento existencialista[16]. Más tarde, Marcel llegó a rechazar él mismo la etiqueta en favor de neosocrática, en honor al ensayo de Kierkegaard “Sobre el concepto de ironía”.
