Medicación ansiedad social
El trastorno de ansiedad social (también conocido como fobia social) implica un miedo o ansiedad a ser humillado o escudriñado en situaciones sociales, que dura al menos seis meses. Este miedo provoca un malestar significativo o un deterioro del funcionamiento cotidiano (por ejemplo, social o laboral).
No hay respuestas claras sobre por qué algunas personas desarrollan el trastorno de ansiedad social, aunque las investigaciones sugieren que pueden estar implicados varios factores. Al igual que la mayoría de los problemas de salud mental, el trastorno de ansiedad social parece estar causado por una combinación de factores biológicos y psicológicos y experiencias vitales difíciles. Entre ellos se encuentran:
La forma más eficaz de tratamiento del trastorno de ansiedad social es la terapia cognitivo-conductual (TCC). La TCC para el trastorno de ansiedad social puede incluir la terapia de exposición, que implica la exposición controlada directa o imaginaria a objetos o situaciones que generan ansiedad. Los medicamentos, como los ansiolíticos y los antidepresivos, también han demostrado ser eficaces, y muchas personas reciben la TCC y la medicación de forma combinada.
Cómo hacer amigos con ansiedad social
Las personas con fobia social temen que los demás las perciban como extrañas, embarazosas o incluso risibles. Su comportamiento (por ejemplo, su forma de caminar, comer o hablar) o los signos visibles de su miedo (por ejemplo, sonrojarse, sudar o temblar) les resultan embarazosos. Esta ansiedad no siempre es tan fuerte: suele referirse a situaciones en las que uno es observado o evaluado, como los exámenes o cuando habla o come en público. Sin embargo, también puede producirse cuando se trata directamente con la gente, como al hablar con desconocidos o personas del sexo opuesto, o al tratar con personas con autoridad. Las personas con fobia social evitan estas situaciones siempre que sea posible, o sólo las soportan con mucho miedo. A menudo se producen reacciones físicas de ansiedad (por ejemplo, palpitaciones, náuseas, diarrea o tensión muscular). A partir de esto, puede desarrollarse un ataque de pánico. Las personas con fobia social suelen tener dificultades para encontrar pareja o para desarrollar con éxito una carrera profesional, incluso cuando tienen la cualificación personal adecuada.
La fobia social es una de las enfermedades mentales más frecuentes. Entre 7 y 12 de cada 100 personas sufren fobia social al menos una vez en su vida. Las mujeres se ven afectadas una vez y media más que los hombres. La enfermedad suele surgir en la adolescencia.
La ansiedad social arruinó mi vida
Aunque seamos bastante independientes, a todos nos preocupa lo que los demás piensen de nosotros de vez en cuando. Pero con la ansiedad social, las interacciones cotidianas pueden resultar abrumadoras. Podemos llegar a preocuparnos tanto por lo que piensen los demás o por lo que podamos estropear que no podemos funcionar al máximo de nuestro potencial.
Lamentablemente, esto puede hacer que sea aún más difícil obtener tratamiento y apoyo para la ansiedad social. Después de todo, ¿cómo puedes pedir ayuda a la gente cuando las interacciones sociales son la fuente de tu estrés? Las personas con fobia social pueden preocuparse por cómo serán percibidas si revelan que necesitan ayuda.
Aunque la ansiedad social se diagnostica -y se trata- mejor con un profesional de la salud mental autorizado, el coaching puede ser una magnífica fuente de apoyo. Las relaciones de coaching son espacios intrínsecamente seguros en los que las personas pueden obtener una dosis extra de consideración positiva incondicional, resolver sus preocupaciones sobre las interacciones sociales y escapar del estigma que suele acompañar al tratamiento de la salud mental.
El trastorno de ansiedad social se produce cuando una persona experimenta miedo y estrés agudos cuando se encuentra en entornos sociales. Aunque es habitual que las personas se sientan nerviosas cuando tienen que mantener una conversación importante o hablar en público, la ansiedad social es más que eso. Las personas con trastorno de ansiedad social se sienten tan angustiadas por sus síntomas que afectan a su vida cotidiana.
Cómo hablar con alguien cuando se tiene ansiedad social
Durante más de un año, hemos estado evitando la mayoría de las situaciones sociales para mantenernos a salvo del coronavirus. Pero con la llegada de las vacunas llega la perspectiva de volver a nuestras rutinas sociales normales, desde las reuniones familiares hasta las charlas junto al refrigerador y la hora feliz.
Si eso no es cierto para usted, puede ser el caso de alguien que conozca. Después de todo, la ansiedad social es el segundo trastorno de ansiedad más común, que afecta a unos 15 millones de adultos estadounidenses, según la Asociación de Ansiedad y Depresión de Estados Unidos (ADAA).
Refuerce la idea de que es perfectamente natural, y está bien, sentir una ansiedad adicional cuando nos reincorporamos a las situaciones sociales después de haberlas evitado en gran medida durante la pandemia, dice Dave Carbonell, PhD, un psicólogo clínico que se especializa en el tratamiento de los trastornos de ansiedad.
El año pasado fue un reto para todos. Y es posible que haya desbordado nuestros mecanismos habituales de afrontamiento. Hazle saber a tu amigo o familiar que acudir a un terapeuta puede ser una forma útil de gestionar todos estos sentimientos de ansiedad.